martes, 13 de septiembre de 2011

Itálica, cuna de emperadores.


Los orígenes de romanización en el sur de Hispania

Publio Cornelio Escipión
Publio Cornelio Escipión (el Africano) tras adentrarse en la conocida como Hispania para los romanos y Hesperia para los griegos, inicia su invasión por Cataluña bajando por el Mediterráneo y tras conquistar Cartago Nova, la actual Cartagena, posteriormente venció a los cartagineses dirigidos por Asdrúbal Barca, hermano de Anibal, en la batalla de Baécula en el entorno de Bailén en el 208 a.c., y siguió avanzando por el valle del Guadalquivir. En 206 a.c., se produce la última batalla de Ilipa en (Alcalá del Río) donde Escipión volvió a triunfar y definitivamente cayeron las tropas cartaginesas coincidiendo con la rendición de la última ciudad cartaginense en Hispania, Gadir (la actual Cádiz). Escipión asentó sus tropas sobre el emplazamiento de una ciudad turdetana que fundó llamándola Itálica(Santiponce), pocos kilómetros al norte de Hispalis, la actual Sevilla, y junto a la vía que conducía a Emérita Augusta.

Hasta ese momento Roma aún no estaba establecida como un imperio, solo era una república en guerra contra Carthago que no se encontraba totalmente extendida en Hispania. No sería hasta el año 25 a.c. cuando el emperador César Augusto lograra conquistar la totalidad de la península ibérica.

Anfiteatro Romano (Itálica)
Los orígenes de Itálica surgen tras las dotaciones territoriales que  Escipión concede a sus  soldados veteranos heridos y jubilados para crear un asentamiento militar permanente que controlara y asegurara los territorios conquistados, este lugar constituye un emplazamiento estratégico por su proximidad al puerto situado a orillas del Guadalquivir junto al teatro romano de Itálica.
Se creó la Vetus Urbs y tres siglos más tarde, como consecuencia de este asentamiento el emperador Adriano ordenó la construcción de la Nova Urbs, la actual Itálica que se puede visitar, ya que la ciudad original está bajo el actual pueblo de Santiponce.
El lugar elegido por Escipión fue una colina cercana al Guadalquivir, sobre un poblado Turdetano, desde donde se controlaban las comunicaciones con Lusitania, los enlaces fluviales, la ruta de los minerales procedentes de sierra morena  y se enclavaba en unos terrenos que acogían un conjunto de ecosistemas que favorecían la vida en este lugar. Se considera el asentamiento romano estable más antiguo de la península ibérica.

Emperador Trajano
“La época de mayor desarrollo llegó con los emperadores Marco Ulpio Trajano (53-117), nacido en la ciudad, y Publio Aelio Adriano (76-138) que residió en él. Bajo el mandato de Adriano, que nació en Roma pero cuya familia provenía de Itálica (familia Aelia), la ciudad consiguió un gran desarrollo y obtuvo la categoría de colonia con el nombre de Colonia Aelia Augusta Itálica.”
En el siglo I, siendo emperador Trajano, ordenó la construcción de un acueducto ya que hasta ese momento el agua procedía de los manantiales existentes en la cornisa del Aljarafe. Este nuevo acueducto abastecía a la vieja ciudad de Itálica del agua necesaria que era conducida desde las Fuentes del Guadiamar. Es en el S II cuando a raíz de la ampliación Adrianea se construyó un segundo acueducto procedente de Tejada (Huelva) para ampliar la capacidad de abastecimiento.




Emperador Adriano
Es a comienzos del siglo II cuando a raíz de la ampliación urbana de Adriano se construyó un nuevo acueducto para el aprovechamiento de aguas procedentes del Valle de Luna en las cercanías de Tejada la Nueva (Huelva).
Para el almacenamiento y distribución de estas aguas potables y de calidad se construyeron los Castellum Aquae (depósitos de distribución) como reserva para el abastecimiento a la mayor demanda de aguas que requería la Nova Urbs, como ejemplo de ello eran las fuentes públicas que suministraba el agua necesaria a la población,  las Termas mayores y Menores con que contaba Itálica.
El Conjunto Arqueológico de Itálica ofrece la posibilidad de disfrutar de un entorno paisajístico admirable en el que se puede contemplar el trazado de una ciudad romana italicense que albergaba la élite social del Imperio Romano afincado en Hispania, cuyo mayor esplendor se alcanzó en tiempos de Adriano en el primer tercio del siglo II.
El espacio cuenta con anchas calzadas dispuestas en torno al cardo máximo de norte a sur y el decumano máximo de este a oeste, y el resto de cardos y decumanos menores complementan el trazado original de la ciudad romana que aún conserva las aceras porticadas donde estaban dispuestas las fachadas de los establecimientos comerciales (tabernae) hacia las calzadas, preservando hacia el interior las zonas habitacionales.  
En el planteamiento de los edificios se puede comprobar el método   utilizado con diferentes materiales para su construcción en opus cementium, opus Incertum, opus cuadratus, opus latericium que aportaban robustez y esplendor a las domus (casas domésticas) que aquí solían estar edificadas en dos plantas aunque en la ciudad de Roma, estas edificaciones alcanzaban las cinco plantas.
La Casa de Los Pájaros es un ejemplo de vivienda de grandes dimensiones a la que se accedía a través del ostium (puerta), un espacio a modo de zaguán (vestibulum), con detallada peculiaridad ya que se abre a la calle con una triple entrada, dando paso una vez que atravesamos la entrada al peristilo, patio de grandes dimensiones con una galería alrededor de un jardín central creando un punto de luz y ventilación a la casa. Aún se conserva su impluvium además de contar con uno de los mosaicos de más interés en Itálica con la representación de más de treinta especies de aves.
Otros edificios semipúblicos para el disfrute de ciertos sectores privilegiados de la población es el edificio de la Exedra y el del mosaico de Neptuno, que ocupa una superficie de 6.000 metros cuadrados y contiene el pavimento que le da este nombre, era el fondo de una piscina de agua fría, así como el magnífico mosaico del laberinto y la del Planetario, donde se encuentra un mosaico con las siete divinidades estelares relacionadas con los días de la semana.
Grandes tesoros en ars musivaria (mosaicos) con teselas de distintos tonos que componen una espectacular obra y edificios públicos como el Colegium que guarda la muestra del mosaico de Los Pigmeos que perteneció a uno de los muchos baños con que contaba el edificio.
Itálica cuenta con un Anfiteatro de los mayores del Imperio con aforo estimado entre 20.000 y 25.000 espectadores superando claramente la demanda de la población existente, su planta es ovalada y el graderío está distribuido en tres niveles, además cuenta con una superficie para la celebración de espectáculos, la arena, y una fosa subterránea para albergar las fieras (fosa bestiaria). Aún se conserva la Tábula Lusitoria donde se recogen las normas, derechos y obligaciones de los gladiadores, los ex votos a la diosa Némesi, quedan reflejados en el pasillo central que conduce a la arena.
La casa de los Pajaros

Intramuros se encuentran las magníficas Termas Mayores, de época de Adriano. Eran instalaciones utilizadas además de para tomar baños, un lugar donde se podía leer, cerrar negocios, o relacionarse socialmente con la población de élite quedando reservado su uso en determinadas horas para el sector femenino y el resto de horario al sector masculino. Estos edificios contaban con bibliotecas, salas de reuniones, vestuarios, letrinas que se conservan, palestras para realizar ejercicios y diferentes salas de aguas frías (frigidarium), aguas templadas (tepidarium) y aguas calientes (caldarium). Las termas menores de época de Trajano, se encuentran en el casco urbano de Santiponce.
También extramuros se sitúa el Teatro de Itálica comenzado a construir en época de Augusto S I a.c. Contiene un aforo aproximado de unos 3.000 espectadores, contaba con un graderío con forma semicircular en torno a un espacio central que se conoce como “orchestra”. Tras el teatro se ubica una gran plaza porticada destinada a acoger a los espectadores, actos sociales, mercados, etc. Además de contener un pequeño templo dedicado a la diosa Isis.
El Traianeum, templo en honor a Trajano y las deidades imperiales, también conforma un foco de interés para el conjunto donde queda latente el esplendor que este inigualable emperador dio a Itálica.
No obstante, este extraordinario impulso que recibe la ciudad en época de Trajano y Adriano se desvanece finalmente entre los siglos III y IV a causa de las circunstancias políticas y económicas, por lo que Itálica padeció su declive a través del abandono, la progresiva reducción de sus servicios, su prestigio, y la pérdida de funcionalidad de sus espacios más emblemáticos.

Autor/a
Luz Ramirez

Fuente: Red de espacios culturales de Andalucia.

1 comentario:

  1. Hola, una noticia bien documentada pero por favor me gustaría que el nombre actual de esta ciudad romana(Santiponce) estuviera un poco más presente. Gracias

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